8 jun 2013

International Work Camps

Cuando sugieres participar en un campo de trabajo, mucha gente se queda sorprendida, parece que estás hablando de Auschwitz. Como sé que es una experiencia que merece la pena pero no sé por dónde comenzar a explicaros en qué consiste, voy a dejar que os hable alguien que participó en ella y que me ha dado su permiso para publicar el siguiente correo:

"Hola!! Qué tal! Mira, me llamo Nerea. El año pasado fui a preguntarte qué opciones tenía para viajar en verano al extranjero a practicar un poco de inglés. Me hablaste de los "campos de trabajo" y nada, al final fui, así que te quería contar un poco cómo había ido todo por si alguien te vuelve a preguntar. Pues eso, cuando me hablaste de los campos de trabajo me gustó muchísimo la idea, gente voluntaria de muchos países que se junta para hacer un labor... Para poder ir primero tuve que hacer una preinscripción (más o menos para marzo) Al mes hacían el sorteo para decidir el orden con el que la gente elegía campo de trabajo. Sale una letra y la gente cuyo apellido empieza por esa letra es la primera y ya por orden alfabético. Cuando fui a apuntarme se me lío un poco la cosa. La chica del IVAJ me dijo que si elegía un campo de trabajo en el extranjero tenía que hacer un curriculum en inglés, y no me aseguraba que pudiese ir. Es decir, tu envías el curriculum y esperas a que los del campo decidan si te han admitido o no. Y claro, ahí vino el lío, porque sólo puedes inscribirte en un campo, pero claro, si decides al extranjero igual al final te quedas sin nada... si no te cogen... La chica me dijo que estaba la opción de ir a un campo de trabajo INTERNACIONAL pero en España, y eso es que viene gente de otros países. Bueno, finalmente arriesgué y todo salió bien. En realidad, a las otras chicas españolas no les pidieron nada de curriculum, así que creo que que nadie tuvo que decidir si admitirme o no, que me dieron la plaza sólo por pedirla. 
Yo elegí Alemania y pretendía aprender inglés. Y sí, aunque luego tenía mis dudas, qué va! Hablábamos todos en inglés, y como experiencia un 10, de verdad. El hecho de viajar al extranjero, gente de muchas culturas y países, teníamos plena libertad para todo, sólo respetar los horarios de "trabajo", pero el resto de tiempo, nos dejaban bicicletas a todos los voluntarios y podíamos visitar la ciudad. Además, los monitores organizaron varias salidas y fiestecitas y no sé, todo muy muy bien.

Ah! Otra cosa, cuando me dijeron que estaba admitida (a través de una carta, y más o menos un mes después de inscribirme en el campo de trabajo de Alemania), llamé al IVAJ para preguntar si había más gente de España que fuera, para no viajar sola hasta Berlín. El caso es que me pude poner en contacto con la otra chica española que iba, y claro, todo fue mejor aún, porque cogimos un avión juntas y una vez en Berlín buscamos el campo juntas, y gracias! que no sé que hubiese hecho yo sola!!


Aleee! Vaya rollo. Sólo te lo quería contar para que lo supieras por si alguien te pregunta, y nada, si quieres preguntarme algo más aquí estoy, vale? En resumen, se lo recomendaría a todo el mundo. Pero claro, supongo que todo depende del campo de trabajo al que vayas y de la gente con la que te encuentres... pero creo que vale la pena. 


Un abrazo, N. R.

PD: por cierto, en cuanto al dinero, yo me gasté 70€ que pagas por trámites al IVAJ, más el billete de avión (a mi me costó 260€) y nada más! (bueno algo en regalos y alguna cosa que me compré allí), pero en el campo nos daban de comer, de dormir, duchas, lavadora, internet, de todo!! Incluso nos pagaron alguna salida por la noche! Genial!"

La oferta para participar en los campos de trabajo se solicita en las oficinas del IVAJ (Instituto de la Juventud). Cada Comunidad Autónoma tiene unas plazas asignadas, información que está disponible para consultar.










Le pregunté poco después a Nerea por el tipo de trabajo que se realiza y ésto es lo que me contestó:

"Respecto a lo del trabajo. En concreto, en mi campo de trabajo, teníamos que construir una especie de casita con maderas, arcilla y ladrillos para el club donde residimos. Este club era para acoger a los niños del barrio por las tardes o los fines de semana, par que tuvieran un lugar donde divertirse y eso. En la casita esta luego iban a montar una barbacoa. Ah! Se me olvidaba, otro de los motivos del campo era ayudar a montar un festival de música. El festival duraba un día y bueno, ayudamos a arreglar un poco el recinto, a colgar unos carteles, el día del festival estuvimos en la caseta de nuestro club ayudando a servir algunas bebidas. Pero vamos, sin ser nada estrictos. Servías media horita y venían otros voluntarios y te sustituían y ya te ibas a bailar o a ver los conciertos...
Lo que te quería decir es que hay distintos tipo de campos. Cuando te metes en el IVAJ a buscar puedes elegir el tema: Voluntariado ambiental, social (niños, ancianos o discapacitados), reconstrucción, etc.
El horario de trabajo, pues a mi parecer bastante light. Empezábamos a las 10 hasta las 13 y luego por las tardes de 15 a 17. Más o menos, porque eran muy flexibles para eso. En realidad parecía que el trabajo era un excusa para juntar a la gente.
Y el tiempo, pues mi campo duró tres semanas, pero más o menos varían de 2 a 4 semanas. Y las fechas, pues desde principios de julio (creo que incluso había alguno que empezaba a finales de junio) hasta mitad de septiembre.
Luego, los voluntarios que fuimos teníamos entre 18 y 25 años y nuestros monitores lo mismo. Allí, como te dije, hablábamos en inglés, porque claro, cada uno era de un país y el idioma más internacional es el inglés; quiero decir, no necesité para nada el alemán (bueno... para llegar hasta el campo el primer día me hubiese venido bien, jeje) "


Bueno, pues ya nos podemos hacer una idea de lo son los campos de trabajo. Como experiencia, como dice Nerea, un 10. Además, hay destinos que ni sospechas, ¿te vienes a Vietnam?








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